Ante el Albacete Balompié (0-0), el Real Zaragoza dejó la portería a cero en su casa por segundo partido consecutivo. Los blanquillos ya superaron al Real Oviedo (2-0) sin recibir ningún tanto, y en el duelo frente al cuadro manchego han prolongado una racha que pone en valía la mejora defensiva en el estadio de La Romareda.
Hace tres jornadas, el Real Oviedo visitó el feudo zaragocista con la intención de continuar su buena dinámica, pero la fortaleza aragonesa impidió a los asturianos generar ocasiones, rematando tan solo cinco veces en todo el choque y saliendo de Zaragoza sin ser capaces de traspasar la red defendida por Cristian Álvarez.
El Albacete, el segundo conjunto de la categoría con más goles a favor -36-, tampoco fue capaz de marcar en La Romareda, siendo el cuarto partido en el que los manchegos se han quedado sin ver puerta en toda la temporada. Una defensa que comienza en la presión ofensiva, y que hace involucra a todos los futbolistas blanquillos, desde los delanteros hasta el guardameta rosarino, necesitando el sacrificio y el trabajo constante del primer al último hombre.
Un crecimiento en la faceta defensiva que ensalzó Víctor Fernández en sala de prensa al finalizar el duelo, alabando la progresión de sus futbolistas en estas labores: “Hoy, en jugada en movimiento, hemos estado espectaculares. Hemos defendido sin tener ningún error grosero ante el que era el máximo goleador de la categoría”.
